El Bendito Señor Krishna dice:
- Voy a proclamar de nuevo aquella Suprema Sabiduría, la mejor entre todas, por la que los Munis pasaron desde este mundo a la Suprema Perfección.
- Refugiados en esta Sabiduría (Upâshrityamâmâ) y partícipes de Mi propia Naturaleza, no renacen en la emanación de un Universo ni son perturbados en la disolución (Pralaya).
- El Gran Eterno es Mi Matriz (Mâmâ-Yôni), en la que deposito el germen del cual proviene el nacimiento de todos los seres, ¡oh Bhârata!
- En cualquier matriz que hayan sido engendrados los mortales, ¡oh Kaunteya!, el Gran Eterno es su Matriz y Yo su Generador Padre.
- Armonía, Emoción, Inercia[note]Sattwa, Rajas y Tamas respectivamente; las tres Gunas de Prakriti.[/note]: tales son las cualidades nacidas de Materia que en el cuerpo aprisionan estrechamente al Indestructible Morador del cuerpo.
- De ellas, la Armonía, que es inmaculada, luminosa y salutífera, ata por apego a la felicidad y a la sabiduría, ¡oh tú sin mancilla!
- La Emoción, la naturaleza pasional que es la fuente del deseo de vida, ¡oh Kaunteya!, ata al Morador del cuerpo por apego a la acción.
- Pero la Inercia, que nacida de la ignorancia alucina al Morador del cuerpo, ata con ligaduras de negligencia, apatía y pereza, ¡oh Bhârata!
- La Armonía inclina a la felicidad; la Emoción a las obras, ¡oh Bhârata! La Inercia entenebrece la Sabiduría y, por el contrario, inclina a la inacción.
- Vencidas la Emoción y la Inercia, prevalece la Armonía, ¡oh Bhârata! Vencidas la Armonía y la Inercia, prevalece la Emoción. Vencidas la Armonía y la Emoción, prevalece la Inercia.
- Cuando la Luz de Sabiduría irradia de todas las puertas del cuerpo, entonces se conoce que está en creciente la Armonía.
- La ambición, la actividad, la energía, el desasosiego y el deseo, nacen del predominio de la Emoción, ¡oh Príncipe de los Bhâratas!
- La ignorancia, el marasmo, la negligencia y la obcecación, provienen del predominio de la Inercia, ¡oh el mejor de los Kuravas!
- Si en la hora de la muerte prevalece la Armonía, va el hombre a los inmaculados mundos de los Grandes Sabios.
- Mas, si predomina la Emoción, renace el hombre entre los inclinados a la acción. Y si en Inercia se disuelve, vuelve a nacer en la matriz de los insensatos.
- El fruto de una buena acción es puro y armónico; mas el fruto de Emoción es en verdad dolor y el de inercia es ignorancia.
- De la Armonía dimana el conocimiento; de la Emoción el deseo; de la Inercia, el error, la ignorancia y la pereza.
- Los que están situados en la Armonía ascienden a lo alto. Los activos moran en la región intermedia. Los inertes se hunden envueltos en las más viles cualidades.
- Cuando el Vidente (Drashta) se percata que las cualidades son el único agente; cuando conoce a Aquel que sobre las cualidades prevalece, entonces participa de Mi Naturaleza.
- Cuando el Morador del cuerpo transpone las tres cualidades de que dimanan todos los cuerpos, se libra del nacimiento, de la vejez, de la aflicción y de la muerte, y bebe el Néctar de la Inmortalidad.
Arjuna pregunta:
- ¿Qué signos son los de quien ha transpuesto las tres cualidades (Gunatita), ¡oh Señor? ¿Cómo actúa y cómo logra sobreponerse a esas cualidades?
El Bendito Señor Krishna responde:
- ¡Oh Pandava! Aquel que no repugna el esplendor (Prakâsham), la actividad (Pravrittim), ni aún la obcecación (Môham) cuando en presencia está de ellas, ni tampoco las ansía cuando ausente.
- El que como neutral espectador (Udâsînavat-Âsînô) no se conmueve por las cualidades y extraño a ellas, imperturbable dice: “las cualidades revolucionan entre sí”;
- Quien ecuánime en el placer y en el dolor, y dueño de sí mismo, mira indiferente la arcilla, la piedra y el oro; quien igualmente firme en el vituperio y en la alabanza no distingue entre lo amado y lo aborrecido;
- El que se muestra inalterable en la honra y en la infamia, que el mismo es para el amigo y para el enemigo, y que renuncia a toda empresa: un hombre tal ha transpuesto las cualidades.
- Y el que exclusivamente a Mí se consagra por el Yoga de la Devoción, pasando más allá de las cualidades, digno es de llegar al Eterno.
- Porque Yo soy la Morada del Eterno, del incorruptible Néctar de la Inmortalidad, de la Eterna Justicia y de la Bienaventuranza Perdurable.
Así, en el Glorioso Upanishad del Bhagavad Gîtâ, la Ciencia del Eterno, el Libro de la Unión Divina, en el Coloquio entre Sri Krishna y Arjuna, es el Decimocuarto Capítulo titulado: YOGA DE DISTINCION DE LAS TRES CUALIDADES